El sombrero: un perfecto aliado

Con la llegada del buen tiempo y del sol veraniego, un sombrero es un buen complemento que no sólo nos protegerá de los rayos solares sino que también nos proporcionará un look más chic o bohemio, según cual sea nuestro estilo. Para soportar las altas temperaturas eligiremos sombreros hechos con materiales frescos como la rafia, el sisal, la paja o el lino.


Para acertar con el sombrero perfecto, se deben tener en cuenta unas consideraciones de carácter general que nos ayudarán a decidirnos por uno u otro:
 

-En primer lugar debemos escoger aquel sombrero cuya forma y ancho de ala se adapte mejor a la forma de nuestro rostro, evitando en todo momento, sobrepasar la línea de los hombros.

-Lo más importante a la hora de elegir un determinado tipo de sombrero es probárselo frente a un espejo de cuerpo entero, ya que de este modo de puede valorar si queda perfecto con el tipo de rostro, altura y tipología coporal. El color no importa, sólo debemos recordar que debe combinar con el resto de nuestro atuendo, aunque no necesariamente tiene que ser del mismo color.

- Si tu estatura es baja o eres pequeña, lo mejor será optar por sombreros de copa mediana y con ala entre mediana y pequeña, ya que de este modo  visualmente se te verá más alta. Si el ala del sombrero es demasiado ancha, se producirá justo el efecto contrario, de modo que parecerás más bajita.

-Si tu estatura es alta, en estos casos hay mayor libertad y podrás utilizar sombreros de ala ancha, sin olvidar que nunca debe sobrepasar la línea de los hombros.

-En el caso de una tipología corporal redondeada, lo ideal sería optar por sombreros con copa alta y estructurados que ayudaran a estilizar. 

 -Otro aspecto a tener en cuenta, es que el sombrero debe quedar perfectamente encajado, ajustándose bien a la forma de la cabeza. 

 

Tras estas consideraciones generales podemos ver  las pautas a tener en cuenta según cual sea tu tipo de rostro:

 -Rostro ovalado

 

Se considera el rostro ideal por lo tanto casi cualquier tipo de sombrero le quedará bien. Lo único que se debe recordar  es que el ancho del ala no sobrepase la línea de los hombros y que su tamaño sea proporcional a la altura y tipología corporal.   A partir de aquí, la elección del sombrero ya depende del estilo y gusto de cada persona.

 

-Rostro alargado

Este tipo de rostro es más largo que ancho, por ello lo ideal en estos casos es conseguir que el rostro parezca visualmente más ancho. Ello se puede lograr  usando cualquier tipo de sombrero con copa redondeada, de modo que no se aporte volumen extra en la parte superior de la cabeza, puesto que alargaría aún más el rostro.

El ala del sombrero deberá ser ancha, aunque sin sobrepasar la línea de los hombros y acampanada. Además deberá tener cierta caída , de este modo el rostro se verá más redondeado. 

 

-Rostro redondo

 

Este tipo de rostro es a menudo corto y ancho. Para ello utilizaremos sombreros altos y  con cierto volumen en la parte superior de la cabeza y que tengan algún adorno o detalle, como cintas, flores, lazos..etc.

Para conseguir este efecto de alargamiento, debemos olvidar los sombreros de formas redondeadas especialmente en la copa, ya que ello acentuaría aún más la redondez del rostro.

El ala del sombrero en estos casos debe ser mediana, es decir, ni demasiado anchas ni tampoco aquellas otras tan estrechas que van pegadas a la cabeza. El objetivo es conseguir que el ala del sombrero sea lo suficientement ancha como para que visualmente la cara se vea más estrecha.

 



-Rostro cuadrado

Se trata de rostro cortos y angulosos con una mandíbula muy marcada.A los rostros cuadrados les van bien los sombreros con formas redondeadas, precisamente para conseguir suavizar las facciones. Lo ideal será escoger sombreros de ala de tamaño mediano pero en la medida de lo posible desiguales o definiendo líneas suaves con ondulación, evitando siempre las línieas rectas. Si deseas alargar tu rostro utliza sombreros situados en la parte alta de tu frente, como berets o bowlers.   

  


- Rostro rectangular



Es como el rostro cuadrado pero más alargado, por ello lo ideal en estos casos es utilizar el mismo tipo de sombreros que para el rostro cuadrado, si bien en este caso no es necesario conseguir  un efecto de alargamiento con una copa alta.   

 



-Rostro triangular

El rostro triangular se caracteriza por una frente estrecha y una mandíbula amplia. En este tipo de rostro el sombrero perfecto es aquel que sea más bien pequeño, con ala y copa pequeña. Evitaremos  por lo tanto, los sombreros grandes y desestructurados.


-Rostro triangular invertido o corazón y rostro diamante

Este tipo de rostros, tienen la frente ancha y la barbilla estrecha. Se deben evitar los sombreros de ala ancha, puesto que acenturían la amplitud de la frente. Con el fin de compensar la barbilla fina y provocar un efecto relleno, el sombrero más apropiado para estos casos es aquel que tenga un ala mediana, un tanto caída y sin estructura.  La copa debe ser de altura media, evitando las copas altas.

Si quieres conseguir un look con estilo, ponte un sombrero

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